Cardíaca

Y con tu corazón entraste y saliste de mí sin cesar, dejándome sin aire. Me empape de ti hasta dar el último grito al cielo y...
Me fui.

Sexo oral

Y nunca
ni él, ni ella
me apartaron
el pelo de la cara.

La vida

Vive.
Eso dijeron todos aquellos que tenían porque callar.
¿Qué clase de vida es cumplir años mientras piensas que ya queda menos?
¿Qué mentira nos contaron de pequeños que nos hicieron creer que todo es posible?
La vida se consume como un cigarrillo sobre el cenicero, nos quema y deshace.
La vie est belle.
¡MENTIRA! ¡TODO MENTIRA!
Hermoso el amor de una madre hacia un hijo, hermosa la mano que te ayuda a levantarte.
Amigos que nunca se van, eso sí es grande, como el amor, pero la vida...
La vida tan sólo sabe irse a la mierda.

Desahucio emocional

Me están echando de mi casa, está cárcel que me asfixia y me envenena.
Las paredes son frágiles pero no puedo destruirlas, he pasado media vida dibujando sobre ellas y la otra media arañándolas con rabia.
Siento su techo hacer presión sobre mí.
Esta casa que algún día de septiembre me acogió entre sus brazos que tal como me abrió la puerta y tiro la llave por el desfiladero.
Hoy me acerco al acantilado cual caracol con la casa a cuestas.
Me sobran cargas y debo soltar el lastre.
Mi propia casa me está echando, quiere desahuciarme de allí.
Por maltratarla, por obligarla a vivir conmigo.
Está cárcel de piel y huesos, esta casa de órganos que funcionan por obligación quiere que continué sola mi camino.
La obligo a sentarse en el acantilado.
Miro al mar, estoy a un salto de la libertad.
Ella me ama y me espera.
Me desprendo de mi casa mientras caigo.
Voy a celebrar con libertad nuestra boda en la playa.
Si tú también de verdad me quisiste un día vendrás a la misa.

Y llego ella

Estaba muy acelerada y mi pulso iba a reventarme una arteria.
La vi bajarse de aquel autobús cutre como la puta distancia.
Pisaba fuerte, iba vestida de sonrisa y con unos tacones que yo ni loca.
Soy mas de airmax.
Pero no soy de marcas, tampoco de despedidas.
No quería que se fuera, al igual que no quiero que se vaya.
Al igual que quiero que me beses, despacito, con caricias.
Sin decir nada.
Me gusta cuando siento que siente que todo sobra menos yo y ella.
Porque el burro delante.
Porque todo estaba jodido.
No tuve tristeza si no algo más grande.
Apatía.
Y llego ella...
Se bajo de ese bus y borro los miedos con esa sonrisa nerviosa que desfila por su cara.
No sé por cuánto tiempo me acompañará, no sé si me querrá hasta mañana.
Pero yo nunca sé nada.
Siempre fui muy gilipollas.
Años de experiencia.
Pero solo puedo deciros que cuando se fue la esperanza, llego ella.
Ilumina todos los rincones de mí casa.
Quiere darme gatitos.
Y yo la quiero a ella.

Carta de libertad

Estoy debordada me siento con si me apretase algo desde dentro y quisiera salir. No sé si es ansiedad, angustia, miedo... Esto no hay humo que lo cure. Aunque ya se acabó eso de vendar mis heridas con malas noches, excusas y un intenso "crack" en mi interior. La tristeza se pasea delante de mí de manera lujuriosa pero que va desde que persistencia y valor son mis compañeros de piso melancolía no volvera a mi casa. Ansiedad me visita con angustia y miedo quieren orgía pero me estoy quitando del vicio. Estoy aburrida del mundo, que peste hace fuera y que frío aquí dentro. Hoy también tuve visita, vino una niña de 6 años miedosa exigiendome cumplir lo que ella de pequeña nos había prometido. Siempre luchariamos por el amor, el amor de verdad. Y yo aquí en casa con frío pensando en libertad, ella si es el amor de mi vida. Más de diez años enamorada y jamás le pedi salir, algún que otro escarceo con humo, locura o éxtasis de por medio pero todo fugaz. Todo por no ser capaz de decirle que quiero pasar una vida con ella. Todo por miedo a decirle quédate. Voy a hacerme amiga de constancia ella me dirá trucos, a ver si la enamoro. Hable con valentía y me dijo que vive en la calle trece. Que le cante las 40. Que me deje de tener polvos inseguros con miedo. Que cumpla mi promesa. Y libertad mi amor por eso hoy estoy aquí. Quiero que con constancia tu y yo formemos una vida y que seas tú mi único para siempre.

Cuando queriendo serlo todo no eres nada

Soy algo así como una de las pocas que fantaseaba con encontrar el amor de su vida en una biblioteca, también soy algo así como una de las muchas que acabo follando drogada sobre el váter de un antro sucio y maloliente. Soy algo así como la niña que leía a Lorca, también moría de amor con Dragon Ball. Soy algo así como la persona que jamás le gusto Titanic y acabo por el amor con varias olas dándole ostias en la cara. Soy algo así como la que se ha acostado hasta con su puta vida pero que el corazón no lo comparte en una relación poliamorosa. Soy ese momento en el que mire a esa persona a los ojos y se paró el tiempo, la gente, las calles, los relojes y casi mi corazón de un microinfarto mientras que a otra persona que quise por igual solo supe incluir en el desorden de mi vida. Soy todo ese ego, toda esa chulería, todos esos he follado, me he metido, he bailado, me la he jugado; pero también soy todo aquello que te hiere como el filo de un cuchillo, soy esos espejos rotos a puñetazos, esas cartas quemadas, esos recuerdos intentados guardar en el olvido, esa correa que en vez de para hacerte el bsdm mi vida en su día hubiera usado para ahorcarme. Soy ese Yo vs Yo. Mi parte débil criticando asqueada a mi parte cobarde. Mi parte cobarde avergonzada y haciéndole el vacío a mi parte débil.
- ¿Y todo esto?
- Por hablar...