Tu nombre

Ese que se parecía a una de mis heridas de guerra, ese que es cura sin necesidad de enfermerías ni iglesias.

Ese que le da un nuevo sentido a la palabra y la lleva a evolucionar, la conviertes en polisémica.

Con ese nuevo significado no habrá banco económico que nos separe, ni ningún otro donde no quiera compartir mi sitio contigo.

Siempre fue una enamorada de las palabras y de su significado, así que también hay pasos del odio al amor.

Aunque tropiece y me duela maldita rodilla, te deseo que todos nuestros pasos sean avanzar.

Quiero ser la última persona en poder decirte:

S, te quiero.

Necesitaba encontrarte

Siento que eres esa felicidad y esa calma con la que tanto soñé. Cuando me besaste por primera vez algo explotó dentro de mí y no lo quería ver. Mis sentimientos por ti han sido todo un camino de luz. Soy muy escéptica en el amor ya lo sabes pero me hacías sentirme tan bien como cuando te paras frente a un rayito de sol a disfrutarlo. Con el tiempo a cada cosa que conocí de ti más me gustabas, conectamos de forma increíble. La sinceridad era lo más fuerte de nuestra relación, ahora lo es el amor tan grande que siento por ti. Como poco a poco has ido rellenando mis días, sin decir demasiado tan solo estando presente. Me has demostrado que tienes la forma de querer más bonita y real del mundo. Yo necesitaba alguien que fuera capaz de quererme sin más, que me deseara, que quisiera mi felicidad y acompañarme en ella, que le encantará despertarse junto a este desastre que soy, que sea capaz de esforzarse por la relación y por entenderme. He necesitado tantas cosas en mi vida que jamás he exigido. Siempre me he conformado con lo que me ha traído la vida y lo he amoldado a mi corazón. Nunca he deseado el amor pero porque nunca pensé que encontraría alguien que entendiese mi forma de amar sin la necesidad de explicárselo, que además fuera capaz de demostrarme que me quiere cada día sin fallar ni uno solo día, que no de pie a errores o malos entendidos y sobretodo que camine conmigo hacia un futuro juntas. Porque yo ya no sé imaginar mi vida sin ti. Siempre me dió mucho miedo sentir esto pero no lo quiero controlar. Siento que nuestro lazo es irrompible, confío en ti y en tu palabra por encima de todo. Estaba muy metida en mí, cerrada y sin ninguna esperanza frente al amor. Entonces llegaste tú, te quedaste y cada que te mantienes a la mi lado me haces sentir más afortunada. Siento que la suerte en la vida es el círculo del eliges rodearte y por fin también tengo suerte en el amor. Eres la pieza que me faltaba para mí felicidad y prometo dar cada día lo mejor de mí. Nunca me parece suficiente y tengo la necesidad de tenerte todo los días a mi lado. No hay margen para los errores, te quiero hacer feliz en todo. Necesito que tengas claro todos los días cuando me escuches o puedas mirarme que eras la persona a la que más amo en el mundo. Gracias por llegar mi amor, necesitaba encontrarte.

La entrega

Y te lo dejé todo.

Me lo deje en tu piel, en tu cama.

En las esquinas y las mesitas de noche que aproveche para los post-it.

Estaba enamorada.

Este poema no trata de ti, trata de mí.

De cuando yo sentí que felicidad era tener a esa persona cerca.

De cuando veía el amor y ya no era algo tan extraño, yo también lo sentía.

Me recordaba a lo que sentía por ti.

El amor me estaba haciendo la cama y yo la aproveche para hacerte el amor.

Quise a cada parte de ti, te mostré cada parte de mí.

Me encanto amar con todos mis pedazos.

Me sentía completa.

Luego me sentí vacía pero me equivocaba.

Yo estoy llena de amor, nunca se acaba.

No sé si te volverán a amar las pestañas caídas pero yo lo haré de nuevo y no a ti.

El amor me llama pero a veces suena a que estoy perdida.

Me encanto amarte a ti que hoy no eres nadie.

Me encanta amarme a mí que hoy lo soy todo.

Hoy me amo como te amé.

Me pongo velas, me regalo flores, me dedico cosas bonitas, vivo orgullosa de mí.

Ni si quiera necesito que me amén así.

Para el próximo amor de mi vida:

Si se trata de entrega, lo daré todo por ti.

Llueve a nueva ilusión

Llorar con canciones bonitas es de personas fuertes.

Lo mejor que me hiciste ver en mí es que sé llorar de felicidad.

Lo mejor que me hiciste ver en ti fue que llorar conmigo te hace sentir segura.

Yo de pequeña odiaba llorar.

Lo hacía mucho de por pena o rabia.

Has venido a darle un sentido hasta a mis lágrimas.

Justo cuando peor ando haces que flote.

Es bonito mirarte y saber que si lloro contigo solo puedo elevarme más.

Tus abrazos y besos son mis tiritas, me hacen sentirme menos rota y más unida a ti.

Así que dime; ¿Eres lluvia o esa nube que necesitaba para volar?

Aviones de papel

Soy de vuelos, de cerrar los ojos y querer viajar lejos de aquí.

De aquí, de allí, de todos lados.

Este donde este, sea por poco o mucho.

Si me come la pena tanto como si me inunda la alegría; quiero volar.

Cigarrillo, cierro los ojos y empiezo a planear.

Sea como sea la vida se ve más hermosa cuando estoy a milímetros de tocarla y a mí me gusta acariciarla con la punta de mis dedos.

Cuento infantil de cuando aún creía en el amor

Yo lo veía a mi alrededor.

Parecía tan bonito como un atardecer.

En casa no solía entrar porque yo vivía en un castillo gigante, pero asomaba como el sol por mí ventana.

Cuando salía del castillo sentía su fuerza por las calles.

Manos volando juntas, los abrazos con carrerilla incluida, cuando te limpian el culo de arena, besos en los churretes de mi cara.

Me invadió esa sensación.

La sentía mucho en la época que jugaba en los columpios y hacia castillos de arena.

Me gustaban mucho esos castillos porque los podía destruir, cosa que el mío no.

Y juro por el capitán del barco de mi vida haberlo intentado con mis carrerillas, abrazos y muchos besos en los churretes.

Huele un poco a mierda

Sólo necesito escuchar tu voz.

Nada más.

De echo, te suelo percibir antes de escucharte.

Eres el detonador de mi bomba interna.

La llave de mi caja de Pandora.

Pocos entenderán el por qué de esto.

Porque cuando el mal te toca, lo identificas a kilómetros aunque sea otra persona.

Todo lo ruin me recuerda a ti.

Te ahorcaría con la misma correa que me pegabas.

Me arrebataste casi toda mi integridad.

Sé la basura que eres así que nunca te atrevas a intentar hablarme o abrirás a pandora y...

Precisamente tú ¿quieres abrir mi caja para ver que hay dentro?

¿Sabes que hay maldito cabrón?

Están todos mis demonios esperándote.

Ya no se espera hasta el matrimonio

_ ¿Por qué no la puedo soltar?

_ Porque cuando ella abre su corazón el tuyo tiembla como una gelatina.

_ Pero no siempre lo abre, también me lo cierra.

_ ¿Y que piensas hacer si lo vuelve a abrir?

_ Decirle que arranco la puerta para que no se cierre más o me marcho con el corazón y las piernas temblando.

Reina

Te dedique dos semanas.

Cariño que solo se lleva mi gente.

Mi tiempo que es un tesoro.

Hice música para ti.

Te hable de mis enigmas, te advertí que no sabrías resolverme.

Me rellenaste como el que pone números al azar en el cuaderno de matemáticas.

Era cuestión de probabilidad, no eras para mí.

Para ser ludopata hay que saber a quien te enganchas y los juegos sucios siempre salen a la luz.

Estoy feliz por una parte, porque al ver que no te conocía como creía supe que tú a mí menos.

No me arrepiento del sentimiento.

Ahora sí tenemos que hablar de ti, 

sólo puedo decir que te tuve amor y se quedó en asco.

Atemporal

Somos una generación inconsciente.

Ahora todos quieren un amor a la antigua.

A la antigua dónde eras violada en un matrimonio, a la antigua dónde no tenías derecho a elegir con quién casarte. Quieren volver al lugar donde el matrimonio tuvo que inventar el divorcio para seguir existiendo.

Esa época dónde el amor era lo que menos importaba para casarse.

¿Existía el amor en esa época? 

O os acojona tanto que queréis volver a la zona de seguridad.

Esa zona donde si estás conmigo no eres nadie sin mí, esa zona que te inválida como individuo.

¿Qué os da miedo?

¿El amor o la soledad?

A mí la soledad me hizo menos daño y aún así nunca voy a dejar de creer en el amor.

No en ese amor que grita te quiero con ramo de flores, si no en ese amor que quiere serlo todo pero conmigo.

Evolución, cambios, movimiento, esa mano que te agarra, esos oídos que te escuchan, esos ojos que te miran como el puto desastre que les hace perder la cabeza, ese amor quiero yo.

Es un amor dónde nadie va delante, esa clase de amor que es más feliz viéndote cumplir tus objetivos que sus deseos, donde no importa sentir más porque es de fuertes, un amor dónde solo nos conformamos con lo merecido.

No se a que época pertenece este tipo de amor y tampoco soy fan de lo actual, actual que no nuevo.

Las mentiras han existido siempre, ese amor del que hablo también es atemporal.

La línea roja

Si tu quieres a esa persona hay que intentarlo hasta el final.

Lucha, lucha, lucha.

Pero no ves el final...

¿Dónde está la línea roja?

Queríamos que fuera para siempre pero hay relaciones que se acaban de repente.

Mil orgullos tragados por los pasos mal dados. Yo nunca tuve miedo, me tragué todo el ego.

Te enfrenté a la cara y volviste la mirada, no sabía que hacer, mi corazón no se perdonaba.

Yo quería gritarte, no quisiste escucharme.

Y tras sentirme dolida, tras mil intentos hoy llega mi despedida.

Diste luz a mi vida cuando más oscura estuvo, me ayudaste a quererme y a deshacer los nudos.

Te lo quise dar todo pero ya no podía, cuando me equivoqué yo no pude ver que sentía.

Yo quería cerrar tu decepción, explicártelo todo.

Ahí vi que la línea roja quedó tras de mí, me la había pasado.

Yo nunca te deje sólo y tu ya más de 10 veces me has rechazado.

No voy a volver a buscarte ni sé si te veré volver pero 2 años han pasado, espero que cuando llegue mi muerte no sientas que te han quitado algo que te estaba dando la vida.