Yo y mis pensamientos

Lo que sentimos, lo que vivimos, lo que hacemos y lo que no. Todo nos afecta, todo nos influye. Para bien o para mal nosotros no pasamos por la vida, la vida pasa por nosotros.

viernes, 21 de junio de 2019

Pequeñita

En realidad...
Tú sólo querías ser feliz ayudando a los demás.
Viste el mundo.
Se rompieron tus gafas rosas.
Creías que todo era negro.
Recuerdas que tienes miopía.
La percepción puede ser equivocada.
Escasas veces es rosa, algunas negro.
La mayoría; transparente.
Te guste o no.
Hay que mirar y aceptar.
Primero dentro.
Hoy he mirado.
Te encontré a ti.
Mirando tras las gafas rosas.
De ese color pintabas tu mundo.
No sé si lo gastaste.
Yo te voy a comprar uno nuevo.
Te quiero pequeña.

Enamoramiento

Últimamente me paro a pensar pero ya no tanto en quiem me enamoré, si no en quien se enamoró de mí.
O que me quisiera recíprocamente.
¿Por qué siento que yo quise más?
¿Por qué estar conmigo si nunca llegue a serlo todo?
Lo bueno, la mayoría no fue mucho tiempo.
Solo él y ella.
Él me quiso raro pero bien, después todo cambio.
Ella o no me quiso bien o no me quiso nunca.
Fui feliz a veces.
Es lo que importa.
O aprendo o gano.
Réquiem por mí.

viernes, 14 de junio de 2019

Mujeres

La primera que me decepcionó estaba delante del espejo. A la segunda la quería tanto que me buscaba dentro de sus ojos, creía que así  estaría siempre dentro de ella como una vez estuve atrapada en su vientre. Las demás...
Marihuana, amistades, sexo.
Bollera.
Me encontré.
A mi primera decepción por amor.
Una tras otra.
Todas locas y yo, más loca que todas.
El sexo es más bonito, el amor más fácil.
La caída más dolorosa tras el subidón.
Humildad.
Ya no era tan lista, no como creía.
Si más fuerte de lo que imaginé.
Este también debería ser mi terreno.
La vida es tierra de nadie.
Sólo la primera me quiere.
La que pensaba que invento el juego.
Y unas bragas le limpiaron los cristales.
¿Ves? No está todo dicho.
Mi cara de resignación a media sonrisa.
Mujeres...

domingo, 2 de junio de 2019

Nunca te perdonaría

Nunca.
Ni en mil años lo olvidaría.
Ojalá.
Si lo olvidará quizás
podría perdonarte
pero representas
todo lo que odio.
No fue un mal folio,
ni un porro en el banco,
lo que hace que no pueda
dejar la mente en blanco.
Eres mi pesadilla.
Todo el asco que me das.
Todo lo que nos has hecho.
No lo podré perdonar.
Ni aunque pudiera,
mi mente te odia
y te espera.
Y yo sigo deseando
sacar la mierda fuera.
Todos mi preguntan.
Si algún día lo haré,
si te perdonaré.
Creo que es lo único
en lo que jamás podré
desprenderme del dolor
para que pueda desaperecer.
Si alguna vez vi en ti un padre
eso desapareció más rápido
que lo tardaste en dar tu primera voz.
Destruiste todo lo que quería, en lo que creía,
lo que sentía, lo que me quería.
No existe insulto para ti
pues con toda la educación
que me he elaborado aprendí,
la mierda se barre sola.
Por desgracia, siempre vivirás en mí.
Como el asco más  profundo.
Ni aunque quisiera.
Sé que no podría.
No lo quiero hacer.
No mereces esos debates sobre que hacer.
¿Suicidarme o calmar la ansiedad?
Pastillas.
¿Cuántas?
¿24? ¿3?
No te lo mereces.
Golpes, quemaduras, cabezazos, sangre.
Hace poco me arranqué piel muerta.
Quiero creer que
te borré de mi piel.
Creí que el texto sería más  breve.
Me faltan palabras
para decirte: te odio.
Jamás.
Nunca se borran,
ni los recuerdos,
ni las pesadillas.
Insomnio.
Asco es poco
para decir lo que
siento al verte.
Te libras de mucho
al rodearte de gente
a la que quiero,
a ellos no les haría daño
pero a ti...
Cuando te veo haces
florecer una rabia que
casi no controlo.
No me conoces.
Sabes que no miento.
Espero poder contenerme
si algún día  te tengo
a la cara, cobarde.
Ya no te tengo miedo.
Muero por devolverte
tan sólo uno de todos
los que recibí.
Nunca me des
la oportunidad.
Pareceré una loca.
Me da igual.
Has desequilibrado todo.
Mi vida, mi gente, mi casa.
Mi mente jamás estará tranquila.
No listo.
Estas cosas no se superan.
Me da asco pensar
que algún día intentes
darme la mano.
Explotaría.
Eres un mierda.
Hasta nunca.