La vida. La gota que cae. Sangre.
Un nuevo amanecer comienza, yo sigo haciéndole de carroña a mis monstruos.
Ansiedad me come por el pecho, siempre fue la más lujuriosa de todas.
Miedo siempre fue de travestirse y se viste de pereza para dejarme de piedra, a veces no puedo mover ni un músculo.
NO, no pienso ponerme a enumeraros.
Mis ojos se ponen como platos pero como siempre, acabo siendo yo vuestra comida.
Mis lágrimas, sudor y sangre os dieron de beber.
Mi cuerpo os alimenta.
Moriréis, estoy podrida.
Yo y mis pensamientos
Lo que sentimos, lo que vivimos, lo que hacemos y lo que no. Todo nos afecta, todo nos influye. Para bien o para mal nosotros no pasamos por la vida, la vida pasa por nosotros.
domingo, 2 de septiembre de 2018
Monstruos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario